
El
Hedonismo es la búsqueda última del placer en la vida, es la supresión de todo
aquello que te molesta en la vida en aras de conseguir que eso no te joda y vivir como debe hacerse… Eso
viene de la filosofía y un par de cuestiones un tanto complejas que
mencionaremos más adelante (para parecer inteligentes y entretenidos). Lo que realmente esperamos hacerles entender es que estamos en esta vida
para ser felices, no para andar rumiando desgracias y pensar en eventos que ya
ocurrieron: YA PASARON, o sencillamente estamos plenamente seguros de que
NO OCURRIRAN!! Aprende de lo que te dejaron y sigue (esto se ajusta a muchos
“brothercitos y brothercitas” que no lo han entendido, inclusive para algunos
grandes escritores como quienes les hacen llegar estas intelectualmente
precarias líneas).
Hubo
alguna vez un ¿filósofo? griego llamado Epicuro (así mismo, como el picure
venezolano) que fundamentó toda su doctrina en la búsqueda del placer: dicha
búsqueda debería ser dirigida por la prudencia y así mismo sostuvo que los
placeres se dividían en 3:
Los
deseos naturales y necesarios: necesidades básicas físicas, como alimentarse, calmar la sed,
abrigarse y el sentido de seguridad (esto es normal: no concibo la idea de
andar por la vida sin comer, o sin disfrutar las delicias sensoriales de un buen
vino).
Los
deseos naturales e innecesarios: una conversación amena, la gratificación sexual y las artes (aquí
debo disentir con Picure: la gratificación sexual, a nuestro juicio, debió ser categorizada en el enunciado anterior, ello sin caer en explicaciones
innecesarias puesto que ya lo hemos discutido hace un tiempo atrás en “Este
es el verdadero cazador” tributo a Groucho Marx… y a pesar de ser demócratas a
carta cabal NO aceptamos los criterios moralistas que defienden que esto no es así; seguro estoy que más de un moralista allá afuera acuerda conmigo).
Y por último, Los deseos innaturales e innecesarios: fama, el poder político, el
prestigio, nosotros nos atreveríamos a incluir los generados por los vacíos
intereses masivos, (claro, dudo que en su momento Picure debiese lidiar con la socialité ateniense).
Epicuro en su tratado: “populus incessus rebidus… aut auxilium aut damnum imperium" (latín antiguo para: la gente se está volviendo loca... o le echamos una mano o se vuelven locos) y con esto vertió
el resto de sabiduría que le quedaba en estas recomendaciones:
1. Debemos satisfacer los
deseos naturales necesarios de la forma más económica posible. Traducción: no
hay mucho dinero: se nos viene el vino de caja...
2. Podemos perseguir los deseos naturales innecesarios hasta la saciedad de nuestro corazón, no más allá. Traducción: caza mas nunca recolectes...
3. No debemos arriesgar la
salud, la amistad o la economía en la búsqueda de satisfacer un deseo
innecesario, pues esto solo conduce a un sufrimiento futuro. Traducción: Puedes jugarte todo por eso, pero sépalo que te va a costar...
4. Hay que evitar por
completo los deseos innaturales e innecesarios pues la satisfacción que
producen es efímera. Traducción: no lo hagan, aunque parezca bueno… de pana ¡NO LO HAGAS!
Basta de letras antiguas que aquí no vinimos a impartir una clase de dogma filosófico del placer, lo que pretendemos hacerles entender con estas palabras es que dejen de pensar en tonterías superfluas y dedíquense a vivir: si se sienten mal, tómense un whiskey, la sabiduría popular venezolana habla de la capacidad del etanol de producir serenidad… ¿No beben? Pues suerte con el agua
Viajen, escriban, lean, fúmense, compren
cosas, desestabilicen el país, miéntenle la madre a Nicolás, tomen vino, salgan a caminar, practiquen el sexo y lo disfrazan de amor, en fin la
verdad me importa poco lo que decidan hacer, pero si les hace sentir bien
simplemente háganlo, persíganlo, vayan tras ello… Ésa es MI filosofía.